Lo necesita para todo lo que empieza con sofreír cebolla y termina con una salsa abundante. Para carne al vino, curry de verduras e incluso salsa de tomate casera. Porque una cacerola es más baja que una olla clásica y tiene un fondo más ancho, por lo que es más fácil remover en ella, la salsa espesa más rápido y la carne se sella maravillosamente antes de añadirle líquido.
Si solo tiene ollas altas y sartenes en casa, le falta este ayudante universal. La Cacerola es ideal para cocinar a fuego lento, estofar, hornear e incluso servir. En pocas palabras, si quieres que la comida quede jugosa, aromática y auténtica, no podrás prescindir de una cacerola.
Cacerolas – maestros de la cocción lenta y el estofado
Las cacerolas más populares según las valoraciones de nuestros clientes
Comparemos
Cacerola vs. olla
¿Necesitas evaporar, reducir o sofreír? Elige una cacerola.
- Fondo más ancho y paredes más bajas.
- Ideal para preparar platos en los que se busca un sabor intenso: salsas, ragús, mezclas de verduras o carne estofada.
- Gracias a su gran superficie, la comida se sofríe mejor y los líquidos se reducen más rápido. Perfecto para cuando se necesita evaporar el agua y concentrar el sabor. Es más fácil remover y servir, y si el material lo permite, también es adecuado para hornear.
¿Está cocinando en agua, durante mucho tiempo o en un volumen mayor? La Olla es su garantía.
- Base más estrecha y paredes altas.
- Lo más adecuado para cocinar grandes volúmenes de líquido: sopas, caldos, pasta, patatas o guisos con mucho jugo.
- Las paredes altas ayudan a mantener la temperatura y el vapor, por lo que el líquido no se evapora innecesariamente. Ideal si quieres cocinar los ingredientes a fuego lento en lugar de freírlos intensamente.
¿Qué material de cacerola elegir?
- Ideal para cocinar a diario, desde freír carne hasta cocer a fuego lento o reducir salsas.
- Es resistente y también apta para el horno.
- Antes de cocinar, es necesario dejar que la cacerola se caliente y añadir un poco de grasa, ya que el acero inoxidable no tiene una superficie antiadherente natural, y la comida podría pegarse sin ella.
- Perfecta para platos más delicados: salsas cremosas, mezclas de verduras o risottos.
- Generalmente tiene una superficie antiadherente que facilita la cocción y la limpieza, y permite preparar platos con un mínimo de grasa.
- No se puede utilizar a altas temperaturas, por lo que no es apta para el horno ni para freír o flambear a fuego fuerte.
- Material excepcionalmente duradero con una larga vida útil: ideal para cocinar a diario sin concesiones.
- La superficie antiadherente permite cocinar con un mínimo de grasa y facilita la limpieza.
- También es apta para el horno y resistente a los arañazos.
- Precio de compra más elevado, pero acorde con la calidad y la durabilidad.
- La mejor opción para guisos caseros.
- Mantiene el calor de forma excelente.
- Es adecuado no solo para la estufa, sino también para el horno.
- Tiene un aspecto tan bueno que se puede servir directamente desde él.
- Es pesado, por lo que requiere mucha precaución al manipularlo.
- Ideal para platos donde es crucial el control absoluto de la temperatura, como reducciones de salsas, caramelo, salsa holandesa o platos delicados de pescado.
- El cobre conduce el calor de manera excepcionalmente rápida y uniforme, por lo que toda la superficie de la cacerola reacciona de inmediato.
- La mayoría de las cacerolas de cobre tienen una capa interior de acero inoxidable para un contacto seguro con los alimentos.
- Sin embargo, cuente con un precio más alto, la necesidad de un mantenimiento regular y el hecho de que el cobre no funciona en la inducción, a menos que tenga un fondo especialmente adaptado.
¿Qué tamaño debe tener una cacerola?
- 2–3 litros: para salsas, guarniciones o cenas rápidas para dos.
- 4–5 litros: el tamaño ideal, versátil para la cocina familiar.
- 6 litros o más: para familias grandes, invitados o para cocinar grandes cantidades.
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¿Por qué no se puede sustituir una olla por una cacerola?
Simplemente porque la olla es adecuada para hervir, mientras que la cacerola es para sofreír, reducir, estofar u hornear. En una olla con paredes altas, el vapor y la humedad se retienen naturalmente, lo que dificultaría freír un roux o reducir una salsa; la salsa quedaría líquida, sin cuerpo ni sabor. Por el contrario, la Cacerola, gracias a su base ancha y paredes bajas, permite que escape el vapor, que el líquido se concentre y que los sabores se mezclen. Y esa es precisamente la diferencia.
5 consejos inteligentes:
Cómo aprovechar al máximo una cacerola
- Cocine sin tapa para cazo si quiere reducir una salsa. La Cacerola tiene una base ancha y paredes bajas, lo que permite una rápida evaporación de los líquidos. Ideal para salsas, ragús o platos en los que se desea un sabor intenso y una estructura densa.
- Tape con una tapa si va a guisar. Por el contrario, al guisar carne, legumbres o verduras a fuego lento, utilice una cacerola con tapa; ésta retendrá la humedad en el interior y garantizará que los alimentos permanezcan jugosos incluso sin una cantidad innecesaria de líquido. No levante la tapa innecesariamente, ya que interrumpirá y prolongará el proceso de cocción.
- Empiece a fuego alto y termine lentamente. Primero sofría la carne o las verduras a fuego alto, luego baje el fuego y pase a la fase de cocción a fuego lento o cocción lenta.
- Utilice la cacerola para hornear. Si está hecho completamente de un material adecuado (por ejemplo, hierro fundido, acero inoxidable), puede usarlo en el horno sin preocupaciones, por ejemplo, para pasta horneada, lasaña o pollo a la crema.
- Utilice también la cacerola para servir. Las cacerolas de diseño de hierro fundido o esmaltadas se ven muy bien directamente sobre la mesa y la comida se mantiene caliente durante mucho tiempo.
Cacerolas de hierro fundido de calidad
Marcas de cacerolas en las que puede confiar
Fissler – Cacerolas alemanas de calidad con una construcción duradera, fondo grueso y detalles prácticos. Ideal para cocinar a diario.
Ruffoni – Cacerolas de cobre hechas a mano de Italia. La excepcional conductividad térmica y la artesanía hacen que cocinar sea una experiencia.
Alessi – Marca de diseño que combina funcionalidad y estética. Ideal para aquellos que quieren cocinar con estilo y originalidad.
Zwilling – Cacerolas universales con precisión alemana. Ofrece una amplia selección de materiales y diseños para cada cocina.
Ruffoni – Cacerolas de cobre hechas a mano de Italia. La excepcional conductividad térmica y la artesanía hacen que cocinar sea una experiencia.
Alessi – Marca de diseño que combina funcionalidad y estética. Ideal para aquellos que quieren cocinar con estilo y originalidad.
Zwilling – Cacerolas universales con precisión alemana. Ofrece una amplia selección de materiales y diseños para cada cocina.
Cacerolas de cobre de calidad
Preguntas frecuentes
Preguntas más frecuentes
¿Para qué es mejor una cacerola?
Una cacerola es ideal para estofar, sofreír, cocinar a fuego lento, salsas y platos "de una sola olla". Gracias a sus paredes más bajas y su fondo ancho, permite un calentamiento uniforme y una evaporación más rápida de los líquidos.
¿Puedo hornear también en una cacerola?
Sí, siempre y cuando la cacerola sea apta para el horno. Las cacerolas de hierro fundido, esmaltadas y de acero inoxidable sin piezas de plástico también son ideales para hornear.
¿Qué cacerola es mejor para salsas?
Para las salsas, lo mejor es una cacerola con revestimiento antiadherente o una de acero inoxidable con un fondo sándwich grueso, que garantiza un calentamiento uniforme sin que se peguen.
¿Qué tamaño de cacerola debo comprar?
Para cocinar salsas y comidas para 2 personas, bastan 2–3 litros. Para una familia común, lo ideal son 4–5 litros. Utilizará un volumen mayor al cocinar para almacenar o para más personas.
¿En qué se diferencia una cacerola de una sartén o una olla?
De la sartén se diferencia en las paredes más altas y la tapa, de la olla, en cambio, en el perfil más bajo y el fondo más ancho. La Cacerola combina las ventajas de ambos: permite sofreír y cocinar a fuego lento en un solo recipiente.