Copa de Borgoña Grand Cru Sommeliers Riedel

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La revista inglesa de vinos Decanter describe esta copa de Grand Cru Sommeliers de Borgoña con motivo de una cata comparativa como "La mejor copa de Borgoña de todos los tiempos, adecuada tanto para los borgoñas jóvenes como para los viejos"

Otro galardón inusual para esta forma única de 1957 es que el Museo de Arte Moderno (Nueva York) tiene este vaso en exposición permanente.

Sin embargo, las malas lenguas también llaman a esta bella creación "pecera", porque el recipiente para beber, con una capacidad de más de 1000 ml, es sencillamente único. (Advertencia: nunca sirva más de 150 ml.)

Los vinos ligeros no se sienten bien en una copa de Grand Cru Sommeliers de Borgoña, su falta de expresión se pierde por completo en ella. Los vinos con cuerpo, en cambio, "florecen" literalmente en él y presentan incluso los aromas más finos con una plenitud e intensidad insospechadas. Las variedades tintas de piel fina producen vinos menos intensos y con una acidez que puede estropear la experiencia de consumo.

En cambio, la forma de la copa Grand Cru Sommeliers de Borgoña integra la acidez en el sabor afrutado. El vino de esta forma suavemente abierta fluye directamente sobre la lengua y realza los sabores frutales y dulces. Como resultado, la boca desarrolla un emocionante juego de fruta y acidez que complementa armoniosamente la impresión gustativa de este vino.

Las copas de Borgoña Grand Cru Sommeliers Riedel se recomiendan para:

• Barbaresco, Barolo, Beaujolais Grand Cru
• Blauburgunder, Borgoña (rojo), Gamay
• Clos de Vougeot, Dornfelder, Echézaux, Moulin a vent
• Musigny, Nuits Saint Georges, Pommard
• Romanée Saint Vivant, Santenay
• Volnay, Vosne - Romanée, Nebbiolo, Pinot Noir

Serie SOMMELIERS:

Claus Riedel presentó la primera serie de copas para entendidos en 1973 en Orvieto en colaboración con la Asociación Italiana de Sumilleres A.I.S. (Associazione Italiana Sommeliers). La serie incluye 10 tamaños diferentes.

A partir de este momento, el mundo del vino ha cambiado fundamentalmente.

En diferentes regiones y continentes se producen hoy en día vinos que no existían o eran completamente desconocidos en su momento. Por lo tanto, el desarrollo de la serie Sommeliers fue continuado por su hijo Georg Riedel hasta que Sommeliers se convirtió en una "vitrum-vinotheque" a gran escala al más alto nivel de desarrollo técnico.

En 1991, Robert Parker, editor de la revista Wine Advocate, escribió "Las mejores gafas, tanto desde el punto de vista técnico como de disfrute máximo, son las de Riedel. El efecto que estas copas dan al vino fino es realmente extraordinario. No puedo expresar lo suficiente la diferencia que supone"

Gracias a la demanda mundial, la serie Sommeliers es ahora la serie de copas de vino más importante y la serie de copas de vino sopladas a mano más exitosa del mundo. Cada vaso se fabrica individualmente: la parte superior se sopla en un molde, el tallo y la base se moldean a mano según los métodos de producción desarrollados a principios del siglo XX.

Los vidrieros emplean su talento, sus habilidades y su cuidado son esenciales para dar a la serie Sommeliers la artesanía que los clientes esperan. Los sombreros están hechos de vidrio con más de un 24% de contenido de plomo.